martes, 17 de febrero de 2009

VIVIENDO BAJO UNA PROTECCION SEGURA


Hace algunos años trabajé en la venta de seguros de vida, sin embargo hubo algo de esto que siempre llamó mi atención, la gente toma un seguro de vida por si se muere, parece paradójico, pero en general es así como funciona, el seguro no protege mi vida, solo ayudará económicamente a aquellos que yo haya designado como beneficiarios al momento de morir.

Pero existe un mejor seguro de vida que a diferencia de los que yo vendía, el beneficiario es quien lo toma, y no solo cubre en caso de muerte, sino que otorga una protección diaria, ¡ah! Me olvidaba, la prima ya fue pagada en su totalidad.

Dice el Salmo 91 “El que habita al abrigo del Altísimo Morará bajo la sombra del Omnipotente.
Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; Mi Dios, en quien confiaré.
El te librará del lazo del cazador, De la peste destructora. Con sus plumas te cubrirá,
Y debajo de sus alas estarás seguro; Escudo y adarga es su verdad.


Hoy en día las grandes Compañías de Seguros nos pueden ofrecer varias alternativas para entre comillas asegurarnos, pero nada hay que se compare con la riqueza de la protección divina, quien busca esa protección encontrará bendiciones inimaginables.

No hay duda que en el transcurso de nuestra vida surgirán problemas, peligros y dificultades, Dios nunca dice que estaremos exentos de estas vivencias, pero si nos promete su ayuda y dirección en los momentos difíciles, de ese Dios nos habla el Salmo 91, un Dios fiel que promete estar con nosotros y bien sabemos que él cumple lo que promete.

Así como en el Éxodo Dios dispuso una columna de nube para guiar a su pueblo por el camino y una columna de fuego para alumbrarles por la noche (Éxodo 13:21), de igual forma él hoy nos guía y no nos deja solos, nuestra columna es Cristo, su amor alcanza para todos y para cada uno, cubre multitudes, pero también nos cubre individualmente, y quizás estemos tan acostumbrados a esto que no nos damos cuenta de la obra diaria de protección de Dios sobre nosotros.

El salmo 91 es una demostración de absoluta confianza del hombre en Dios, y esa confianza nace del conocimiento que el autor de este salmo tenía de Dios.
En nuestra vida pasaremos por momentos en que nuestra fe puede tambalear, sin embargo Dios aun así está a nuestro lado, el es nuestro Padre y nos ama de tal manera que dio a su hijo en rescate de nosotros y no nos abandonará, la mejor forma de pasar los momentos de dificultad es conociéndole a él, en la medida que mas le conocemos, al igual que el Salmista podremos declarar victoria en Cristo, aun en los momentos mas difíciles.

2 comentarios:

David López-Cepero dijo...

Pues sí, mejor que sacar un "seguro de vida" es tener "seguridad de vida... eterna", je, je.

Buen pensamiento de-mente. Saludos!!!

Anónimo dijo...

ES VERDAD LO QUE DICES, NOS PREOCUPAMOS DE SACAR SEGUROS DE VIDA Y PAGAMOS MUCHA DINERO POR ESO Y NO DISFRUTAREMOS NADA ,YA QUE DESPUES DE MUERTOS OTROS SON LOS QUE DISFRUTARAN, PERO YO YA TENGO UN SEGURO DE VIDA , DE VIDA ETERNA Y ESTA CANCELADO EN SU TOTALIDAD , NO TIENE LETRA CHICA Y NADIE ME SALDRA CON SORPRESAS DE ULTIMA HORA, TODO ESTA MUY CLARO Y LO MEJOR DE TODO ES QUE LO DISFRUTARE "YO" DESPUES DE MI MUERTE, ¿ QUIERES UNO ? , ESTE SEGURO NO SE VENDE TE LO REGALAN Y SABES QUIEN "" DIOS"" ...... MUMY ......