martes, 9 de junio de 2009

ADORACION E INTEGRIDAD

Oh Señor, enséñame tu camino, para que yo lo siga fielmente.
Haz que mi corazón honre tu nombre. (Salmo 86:11)


El mundo hoy en día está lleno de luces que nos pueden cegar, aun así los cristianos estamos llamados a ser integros, y esa integridad consiste en mantener los ojos puestos en Jesús, sin duda algo simple de decir, pero no tan simple al momento de llevarlo a la práctica.

Como dije, el mundo actual es atrayente, a la vuelta de cada esquina hay distracciones que nos desviarán de nuestro norte, que nos desviarán de nuestro blanco, que es Cristo.

La integridad, como muchas cosas en la vida del creyente está relacionado con la adoración, no puedes pretender ser un adorador si no hay integridad en tu vida.

Muchos asocian la adoración con cierta forma de canto o con algunos momentos de oración e intimidad con Dios, sin embargo adoración es mucho mas que eso, y se relaciona mas que nada con un estilo de vida, el centro de la adoración no somos nosotros ni lo que nosotros hagamos, el centro de la adoración es Jesús, el todo es Jesús, no se trata de ti, ni de mi, sino que de Jesús.

La palabra integridad quiere decir sin división y a eso nos llama Dios, a tener un corazón sin división entregado a él, con la mirada puesta en Jesús.

Nuestro mayor referente de Integridad es Jesús, de principio a fin Jesús se reveló con un corazón integro, totalmente comprometido con el Padre y con su voluntad.

Los adoradores verdaderos e íntegros siguen su ejemplo, nada les distrae ni les aleja de su meta final, dar la gloria a Dios, ser hombres conformes a la medida de Cristo, alcanzar madurez espiritual.

Jesús en el camino a la cruz pudo haber dicho no, esto no es para mi y tenía el poder de hacerlo, sin embargo, él guarda su corazón de todos los que quisieron desviarlo, el estuvo dispuesto a cumplir la misión encomendada, él es integro y nosotros como hijos de Dios, como adoradores íntegros estamos llamados a hacer lo mismo.

Jesús no solo vino a traer salvación el también vino a dictar pautas a decirnos y mostrarnos como debemos ser, a ser ejemplo, está en nosotros el seguirle

Como adoradores íntegros necesitamos tener corazones no contaminados, protegernos de todo lo que busca apartarnos del camino de la adoración pura; y la mejor forma para ello es tener intimidad diaria con nuestro Padre, a veces las cosas que nos apartan de la adoración son buenas en si, recuerden a Marta y María (Lucas 10:38-42), nadie ha dicho que lo que Marta hacía era malo, solo que lo que hizo María era mejor, no desatendamos lo mejor, que es sentarse a los pies de Jesús y adorarle

Es perfectamente posible trabajar muy duro en la obra de Dios y a la vez mantener una apasionante e íntima relación con él, Jesús lo hizo, nunca debemos dejar de lado esos momentos de intimidad con Dios.

La prioridad divina siempre será “primero adorar y segundo servir”

Que nada en esta tierra divida nuestro corazón, "con Cristo estoy crucificado ya no vivo yo, Cristo vive en mi"

Cada día que pasamos nuestra fe es puesta a prueba en un sistema corrupto, la única forma de mantener nuestra integridad es por medio de la intimidad y adoración a Dios

Que al final de nuestros días, podamos decir como Pablo a Timoteo

“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo demás, me está reservada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no solo a mí, sino también a todos los que aman su venida.”

4 comentarios:

Ana María Fabio / Araunapeka dijo...

Gracias por este tema, ha sido un bálsamo refrescante. Me ha dado nueva luz en cuanto a la adoración. "Primero adorar después servir"
que importante, ambas cosas van de la mano.
Muy buen tema, Dios te siga usando en llevar la palabra con tanta claridad.
Un beso, Te Amo.
Anita María Fabio (Araunapeka)

querido lima limon dijo...

que linda publicacion creo que nuestra vida debe ser en constante adoracion hasta en las cosas mas minimas ahi ve Dios nuestra dependencia hacia El.
Dios te bendiga mucho ...
gracias por pasar por mi blog
tu visita es de gran bendicion para mi...
Dios te bendiga muchimilllllllllllll
bye

Anónimo dijo...

Me identifico plenamente con el contenido de tu post. Nos distraemos con frecuencia de lo fundamental, de que esa comunión no se rompa, de que tanta "actividad" por santa que sea, no nos impida tener un tiempo de soledad a los pies del Maestro, de mantener una constante adoración.
Un abrazo y que el Señor te bendiga.

sacri dijo...

Hola pericles, un tema precioso, pues la adoracion debe ser en nuestra vida el pan diario como lo es la palabra de Dios...
como no bamos a adorar a nuestro padre que todo nos lo da, cuando se lo pedimos...
adoremos a nuestro señor y sirvamosle como siervos suyos que somos...gracias por este tema tan bello.
Bendiciones para ti y besos.